Cuando buscamos imágenes de mujeres poderosas o empoderadas, la imagen habitual que vemos es una mujer con traje, dirigiendo el mundo con fuerza y confianza, siendo líder y ganadora. Sin embargo, la misma descripción se puede aplicar a un hombre poderoso.
Entonces, ¿qué es una mujer empoderada desde el espíritu?
Como canalizadora, decidí preguntarle a lo Divino y me llegó este mensaje: Nuestro mayor regalo como mujeres, es traer belleza al mundo.
Por muy nuevo o cliché que parezca para algunos, detente ahora mismo y mira a tu alrededor. Mírate a ti misma. Prosperamos en la belleza, nos rodeamos de ella y como somos muchas expresiones de la misma energía divina, expresamos la belleza en muchas formas.
Traemos belleza al mundo decorando nuestro entorno, regando nuestras plantas, preparando un delicioso café cada mañana para nosotros o cocinando una comida para un ser querido. Del mismo modo, aportamos belleza poniendo un alfiler brillante en una chaqueta, tirando una bufanda o usando un poco de brilli-brilli, o dibujando una cara sonriente o una flor en un papel de oficina. Somos tan mágicas que podemos cambiar la rutina de la ducha en un ritual lleno de belleza y experiencias sensoriales.
Brindamos amor, amabilidad y consuelo, podemos ser desinteresadas e inventivas, prácticas y sensibles. Y todos estos atributos de nuestro ser son los que nos permiten ser más intuitivas y ver más allá de las personas y las circunstancias.
Supongo que ahora está claro que somos increíblemente poderosas.
Ahora, ¿recuerdas la última vez que te regalaste este divino superpoder femenino de traer belleza a tu mundo?
¿Te consuelas cuando sufres? ¿Te dices a ti misma «te amo» cuando la vida se siente difícil? ¿Te regalas alimentos nutritivos? ¿Te regalas tiempo a solas para simplemente estar?
La piedra angular del poder interior es el autocuidado. Aquí es cuando estamos más empoderadas.
Es muy conocido el dicho “Sé el cambio que quieres ver en el mundo”, yo digo, “Sé la belleza que quieres ver en el mundo”
Riega el jardín de tu mente, nútrete con buenos alimentos, canta cuando sientas que se te apaga la voz, ríe cuando estés a punto de estallar de emoción, acaríciate, reconócete a ti misma y a tu poder interior. Ejercita el superpoder para traer belleza a tu mundo todos los días.
Mira cada pequeño acto de autocuidado que haces, como un servicio al mundo. Al darte a ti misma estás practicando la auto responsabilidad y siendo vulnerable al mismo tiempo.
¿Por qué vulnerables? Ser vulnerable significa reconocer la necesidad de cuidarse, que todas las súper mujeres también necesitan colgar la capa y tomarse un respiro.
Ser vulnerable te permitirá ver tu verdad por lo que es. Todo lo que necesita ser sanado, todo lo que necesita ser amado y nutrido. Al ser vulnerable, puedes traer belleza a esos lugares oscuros y hacer amigos y aliados con tu oscuridad. Ilumínala hasta transmutarla y trascender. Y así, estás más empoderada que nunca.
Y todo por ese don divino de traer belleza al mundo y a ti misma.
Nosotras, las mujeres, hacemos que el mundo sea hermoso porque podemos ver un hogar cuando otros solo ven una propiedad, vemos flores coloridas que florecen cuando otros solo ven maleza, somos una mujer empoderada en ciernes al sanar esas heridas que durante tanto tiempo han estado en la oscuridad, y vemos las cicatrices como marcas de belleza de las batallas conquistadas.
Ser empoderada como mujer desde el espíritu, es honrar y reconocer todo lo que es tu divino femenino. Belleza en todas sus formas: bondad amorosa, desinterés, amor duro cuando es necesario, la diosa manifestada, la sanadora, la mujer sabia.
Debes saber que, sin importar dónde te ubiques en estas descripciones, cuando primero somos amorosas y honestas con nosotras mismas, abrimos las puertas a la curación y la transformación para ser la diosa realizada, brillando la luz divina para ti y para el mundo.
Rituales simples de cuidado personal:
· Escucha tu música favorita (y baila y canta si te apetece)
· ¡Cuando no te sientas lo mejor posible, vístete lo mejor posible y date cuenta de lo fabulosa que eres por dentro y por fuera! (incluso si estás en casa encerrada por Cvd)
· Haz una cita contigo misma. Ve a tomar un café a tu lugar favorito, cocina o pide una cena para llevar para ti, ve a una galería de arte, museo o mira esa película que estabas esperando.
· Sal e imagina que estás en tu propia película, y que eres la estrella y la musa que ama todo el universo.
· Regálate algo que te haga recordar cuánto te amas cada vez que lo veas.
· Mira un programa o escucha un podcast que te haga reír.
· No te tomes a ti misma demasiado en serio.
· Consiente tus sentidos: consigue aceites esenciales, prepárate un baño, cómprate flores, enciende inciensos, ponte ese delicioso perfume aunque te vayas a dormir.
Se pueden escribir muchos más ejemplos, pero lo más importante, use tu intuición y autoconocimiento para crear tus experiencias personalizadas de cuidado personal y traer belleza al mundo, a través de ti.
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